24.1.08

De las cosas que suceden con el apagón



Cosas increibles le pasan a todo el mundo, las cosas más extrañas les pasan a los que de un modo u otro estan inter relacionados con nosotros, pero las cosas que pudieron haber sucedido en dias como el de ayer...ésas no tienen nombre.
Luego de un saludable paseo, una podría levantar la mirada y notar la inusual tonalidad del cielo, en ese momento una mujer de edad que pudiera tener, no se...pelo rosa y ¿por qué no?, una sola ceja podría decirle que el cielo rojo significa sangre, para entrar de algún modo en conversación.
Una entonces podría darse la vuelta, restando importancia a las palabras de una mujer tan extraña, solo para presenciar, allí mismo y en primera fila, una serie de sucesos que pudieran (o no) poner punto final a un ciclo de tiempo y espacio, cambiando, de manera hipotética, el curso del destino de un reducido grupo de personas que es probable que no se conozcan entre ellas, pero puede que de alguna manera estén relacionadas.
O puede que no.
Entonces podría ocurrir una desgracia, o mejor aún, una serie de desgracias consecutivas, como en efecto dominó y en la que el resultado final fuera, lejos de una artística imagen, un horrible panorama.
Pudiéramos estar hablando de accidentes de autos, pero son tan comunes, tan normales, que resultan groseramente tediosos. Hablemos mejor de una lluvia de fuego, ya que es esta una situación hipotética, quizás lo primero que una pudiera ver, fuera un enorme árbol siendo mecido con violencia por una fuerza invisible, el árbol a su vez azotaría los cables eléctricos que, castigados por el insensato árbol, se soltarían de sus postes haciendo llover chispas sobre el pavimento, los conductores, azorados por tal espectáculo, virarían los volantes hacia un lado y hacia otro en desesperación, mientras que el árbol del principio finalmente cedería ante las inclemencias dejándose arrastrar por la gravedad sobre una persona que casualmente pasase por ahí para tener una mejor vista del poco común espectáculo de luz y sonido.
Tendríamos entonces a una primera víctima de las extrañas circunstancias.
Si una virara la cabeza solo un poco hacia la derecha, podría presenciar sin asombro alguno a la segunda víctima que, tratando de huir del árbol que caía, fue a dar a la zona de peligro que habían creado las chispas de los cables sueltos, cayendo fulminada al instante sobre la acera de en frente.
Si a estas catástrofes aunáramos los accidentes que por tediosos habían sido eliminados del relato, una podría darse cuenta en cuestión de segundos que, lo que comenzó como una ligera brisa invernal, podría terminar como la tarde mas sangrienta de lo que va del año y que lo que comenzó como un inocente paseo por el parque, pudiera terminar como una velada inolvidable.

8 comentarios:

LauSanBal dijo...

Oh mon Dieu!
Pues bueno, yo la verdad andaba preocupada por todo mundo, porque tu tenias q ir por la Mono, y a esas horas empezo el desastre pero q bueno q estas bien :D

MMBT dijo...

puede ser una de las tardes mas sangrientas del año.

Sino es que la ultima.

Anónimo dijo...

jajaja y vaya que si pasó! ahora no puedo pasar a mi casa por tu arbol de duraznos!!!!

Anónimo dijo...

puede ser una de las tardes mas sangrientas...y será!

Lau dijo...

Con el apagón ... que cosa sucede que cosa sucede con el apagón!!!!
El ventarrón... a mi me parecio hasta erótico ... jejejeje

Jorge Hernández Jiménez dijo...

la ciudad no aguanta ni una brisita. . . .

Sr. Mimo dijo...

Y es que era mi cumpleaños, por eso

Slowhand dijo...

esas son las señales deñ fin de los tiempos, acercaos a dios pecadores
en fin
saludos